Mi nombre es Catalina, y soy una enferma alcohólica en recuperación. Yo tuve que vivir una fuerte experiencia, verme en un hospital, donde toqué mi fondo personal. Pensé que acabaría internada en un psiquiátrico durante el resto de mis días.

En ese momento sí creí todas las palabras que mis compañeros del Grupo 24 Horas de Alcohólicos Anónimos me habían dicho para tratar de ayudarme.

Por eso, y más, le doy gracias a Dios, tal y como cada quien lo conciba, y a mi grupo, porque el día de hoy me siento orgullosa y satisfecha de pertenecer a él, y por estas 24 horas puedo sonreír, dormir, vivir y estoy intentado, con la ayuda de mis compañeros, cambiar la forma de enfrentar mi realidad, en lugar de escapar de ella como había hecho siempre.

Sólo por hoy me siento muy agradecida de lo que el Grupo 24 Horas me ofrece cada día.

Movimiento Internacional 24 Horas de Alcohólicos Anónimos