El deseo de beber me fue removido y nunca más volvió, una vez que acepté el tercer paso durante una terrorífica tormenta en el océano. Después de todo, no tienes mucho que decir ante una cosa así. La definición que la Compañía de Seguros Lloyd’s de Londres da del patrón a cargo de un barco es “capitán bajo Dios”.

Alcohólicos Anónimos, Llegamos a creer… (Cap. 4: “Liberación de la obsesión”)