alcoholicos anonimos

“Hemos visto esta verdad demostrada una y otra vez: ‘Una vez alcohólico, alcohólico para siempre…’ Si estamos haciendo planes para dejar de beber, no debe haber reserva de ninguna clase, ni ninguna idea oculta de que algún día seremos inmunes al alcohol… Para estar gravemente afectado no es necesario que uno haya estado bebiendo durante mucho tiempo, ni que beba tanto como lo hicimos algunos de nosotros. Esto es particularmente cierto en las mujeres. Las potencialmente alcohólicas a veces se vuelven verdaderamente tales, y en unos cuantos años su caso está muy avanzado” (Alcohólicos Anónimos, Alcohólicos Anónimos).

Estas palabras las tengo subrayadas en mi libro. Son ciertas para hombres y mujeres alcohólicos. En muchas ocasiones he abierto mi libro en esta página y he reflexionado sobre este pasaje. Nunca tengo que engañarme a mí misma recordando mis a veces diferentes maneras de beber, o creyéndome “curada”. Prefiero pensar que, si la sobriedad es un regalo de Dios, tal y como yo lo concibo, para mí, entonces mi vida sobria es mi regalo para Dios. Espero que Dios esté tan feliz con su regalo como yo lo estoy con el mío.

 

Alcohólicos Anónimos, Reflexiones diarias