Pensamiento del día
Muchos alcohólicos dirán hoy: “Esta es una buena Navidad para mí”. Recordarán Navidades pasadas que no fueron como ésta. Estarán dándole gracias a Dios (tal y como cada quien lo conciba) por su sobriedad y por la nueva forma de vida que han encontrado. Estarán pensando sobre la forma en que cambiaron sus vidas cuando llegaron a Alcohólicos Anónimos. Estarán pensando que tal vez Dios les permitió vivir en medio de los peligros de sus historiales alcohólicos, cuando quizás con frecuencia estuvieron cerca de la muerte, para que pudieran ser instrumentos de vida en la gran labor de A.A.¿Es ésta una buena Navidad para mí?
Alcohólicos Anónimos, El pensamiento del día
Reflexión del día
La mayoría de nosotros, cuando para pedir ayuda nos acercamos a Alcohólicos Anónimos, descubrimos que no estábamos solos, que no constituíamos una isla solitaria en el océano de la humanidad. En el momento en que hablamos con otro alcohólico, nos impactó descubrir la gran identificación que nos unía, el puente de comprensión que existía entre enfermo alcohólico y enfermo alcohólico. Aquellas personas que nos recibían se acercaron a nuestro corazón, cualquiera diría que nos conocían, que sabían de nuestro sufrimiento, de nuestros intentos fallidos por dejar de beber, de nuestra desesperación, pero en especial de nuestra desesperanza. Y de pronto se manifestó el milagro: nos sentimos de nuevo seres humanos, parte de una comunidad de hombres y mujeres que tal parecía que habían vivido nuestras vidas. En ese nuestro incipiente proceso de recuperación, el pasado se transformó en una segunda oportunidad de vivir, en una nueva vida. Y esta vida sí tenía sentido. Tal vez por eso nos quedamos.
Movimiento Internacional 24 Horas de Alcohólicos Anónimos
