La asociación detecta un incremento de casos que precisan terapia las 24 horas para salir adelante
Más de 200 personas piden auxilio a Alcohólicos Anónimos desde 2011
«Empecé tomándome unas cañas y acabé tirada en la calle con un cartón de vino», relata Blanca G., una usuaria de Alohólicos Anónimos de Elche que este sábado celebró «tres años de sobriedad» en una asamblea organizada por el grupo local.
Como ella, más de 200 personas se han visto obligadas a pedir auxilio a este colectivo que abrió sus puertas hace ahora cuatro años en la ciudad. La agrupación ha detectado un incremento de casos en los últimos ejercicios que precisan de terapias para salir adelante. Los afectados recurren al servicio 24 horas que ofrece la asociación, con el apoyo de un usuario que ha logrado hacer frente a la adicción.
«Necesitamos compartir el sufrimiento para poder ver la luz y por ello sirve de mucho hablar con alguien que ha pasado por lo mismo, no con psicólogos, ni psiquiatras», apuntó Blanca.
De esta forma, muchos de los usuarios que forman parte de esta entidad comparten sus experiencias y acaban saliendo del problema con el paso de los años.
«Este grupo me ha dado la vida, porque yo llegué muy mal. En nueve meses pasé de tener una casa, un trabajo y tres hijos a perderlo todo», recuerda la usuaria, quien reconoce que «el alcohol al principio me daba fuerza, pero acabó convirtiéndose en una enfermedad y hundiéndome la vida».
Con historias personales como esta, la agrupación celebró el sábado su cuarto aniversario y reconoció en público los nueve, seis y tres años de sobriedad de tres afectados.
El colectivo de Alcohólicos Anónimos, situado en la calle Baltasar Tristany, recibió a un centenar de personas en su asamblea conmemorativa en la que se abordó el progreso de la adicción a la bebida.
